Ayer os mostraba un paisaje muy
especial de nuestra tierra, el de los roquedales graníticos con las típicas
peñas caballeras y las desnudas rocas aferradas al esqueleto madre. Algunas de
ellas forman parte de las típicas “marrás”, vocablo que para muchos será
completamente desconocido.
De ayer son otras imágenes donde
recreamos la bella naturaleza floral y paisajística en general de San Esteban
y Sierra de Béjar como telón de fondo.
El resto de fotos se corresponden
con el día ocho de abril de dos mil diecisiete en las que los seguidores podréis veros reflejados. Fue
el punto final a la grabación de Raúl de Dios con el emotivo evento en la plaza
del pueblo.
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