OLIVOS DEL CAMINO.
Secuencia de longevos olivos de
bulbosos tocones y redondeadas copas que jalonáis el camino cual vigías de viva
historia de siglos.
Añosos olivos de henchida, verde
y esponjosa veste de musgo cubiertos, con turgencias de cicatrices restañadas
del hacha y el corvillo.
Testigos de la historia del
labriego, trajinante y arriero, vigilantes silenciosos siglo tras siglo, noche
y día desde aquella Edad Oscura de lejanía.
Impertérritos semblantes ante el paso del
mular y su golpe de herradura, ante tantos y tantos cavadores, vendimiadores y
viandantes.
Sois testimonio de heladas, vientos,
lluvias y sequías, de cuerpos ateridos y manos de hielo.
Sois como cerradas bibliotecas,
silenciosas y empolvadas que guardáis la Historia en vuestro propio seno.
Viejos troncos del camino, cobijo
de rapaces que la corteza mimetizan, oquedades que son guarida de comadrejas y alimañas sibilinas.
¡Oh viejas y altas olivas, como
aquí os denominan, de verde aceituna hojas en la calma, de plateado envés
cuando os mece el viento!
------------------------------------------------------------------------------------------------------
Secuencia de longevos olivos de bulbosos tocones y redondeadas copas que jalonáis el camino cual vigías de viva historia de siglos.
Añosos olivos de henchida, verde
y esponjosa veste de musgo cubiertos, con turgencias de cicatrices restañadas
del hacha y el corvillo.
Testigos de la historia del
labriego, trajinante y arriero, vigilantes silenciosos siglo tras siglo, noche
y día desde aquella Edad Oscura de lejanía.
Impertérritos semblantes ante el paso del
mular y su golpe de herradura, ante tantos y tantos cavadores, vendimiadores y
viandantes.
Sois testimonio de heladas, vientos,
lluvias y sequías, de cuerpos ateridos y manos de hielo.
Sois como cerradas bibliotecas,
silenciosas y empolvadas que guardáis la Historia en vuestro propio seno.
Viejos troncos del camino,
cobijo de rapaces que la corteza mimetizan, oquedades que son guarida de
comadrejas y alimañas sibilinas.
¡Oh viejas y altas olivas, como
aquí os denominan, de verde aceituna hojas en la calma, de plateado envés
cuando os mece el viento!
No hay comentarios:
Publicar un comentario