EL BOSQUE MIXTO SERRANO.
Menos conocido que el norteño
atlántico, el bosque serrano no desmerece en nada de su homónimo del norte,
posiblemente más rico incluso al combinarse en muchos lugares
de la Sierra de Francia las condiciones climáticas mediterráneas y atlánticas.
Densos espacios de castaños, robles, quejigos, cerezos silvestres, fresnos, almeces, alisos higrófilos, arces de Mompellier cubren laderas umbrosas de este
territorio. Bajo la fronda arbórea, el variado sotobosque de madroños, brezos,
durillos, zarzas…, convierte cada vez más intransitable estas superficies que
ahora en otoño visten sus mejores galas.
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